____________________________________________________________________________>

las diferencias nos unen y las diferencias nos separan

Uno de los aspectos que llama nuestra atención a primera vista en la relación en pareja es la atracción. Y para ser más exacto la atracción física. Esa persona que me he encontrado al pasar logra hacerme sentir nervioso, intimidado o muy a gusto… entonces la novedad, la curiosidad de saber quién es él o ella, me mantienen atento a sus movimientos, comentarios, actitudes. Ésa persona, se ha vuelto importante para nosotros. Día y noche empiezo a pensar en él o en ella. Me resulta digno de una buena ilusión lo que estoy sintiendo y lo que empiezo a emocionarme con sus llamadas, con sus detalles, con sus atenciones… Creo que me estoy enamorando…

Todo lo que hace o dice me parece fascinante… sólo él o ella es capaz de cautivarme, es tan distinta o distinto a mí… que me encanta su manera de ser… me atrae como habla, lo que piensa, los lugares a los que le gusta asistir…
Me rio de sus chistes, es realmente una persona muy alegre, divertida y siempre está dispuesto o es afectivamente sensible. Una de las características que más me gustan de su persona es que es muy cariñosa o cariñosa, siempre me está apapachando, abrazando y besando Nunca me había sentido tan bien, realmente ahora sí, encontré a la persona que necesito y que andaba buscando. Además tiene una familia muy unida, se reúnen con mucha frecuencia y todos se llevan de maravilla.

Así van pasando los días, tal vez los meses, e incluso los años… y en este andar… me voy dando cuenta que aquello que me parecía tan maravilloso ya no lo es tanto… de acuerdo a las apreciaciones anteriores, podrían las parejas decir algo así:

• La verdad es que lo que dice mi pareja ya me lo sé de memoria, y no me deja que yo opine algo… estar platicando con él, se convierte en un monólogo bien aburrido.
• La verdad es que es muy ensimoso, meloso, todo el tiempo me quiere abrazar, besar o que estemos en contacto físico, y pues yo me siento incómodo, me asfixia, no mantiene su distancia y me pone de muy mal humor.
• Cada vez de que vamos a una reunión se la pasa contando chistes, es muy bueno contándolos, pero yo la verdad ya me fastidié porque nada se puede hablar en serio, siempre está bromeando.
• Está muy bien que tenga una familia muy integrada, pero a mí me molesta tener que compartir con ellos todas sus reuniones.

Por fín, una de los aspectos por los cuáles me uní, me ligué, me encanté con esa persona, ahora resulta que me molestan, ahora ya no me parecen tan constructivas, es más me siento aburrido, enojado, confundido.

Pareciera que de pronto todas nuestras cualidades angelicales se tornan nuestros más terribles defectos a la luz de nuestra pareja. Estas diferencias que lograron nuestra unión, ahora están a punto de convertirse en nuestro peor enemigo.
Las diferencias alimentan la relación, también la empañan cuando no sabemos manejarlas o tolerarlas… Una gran cantidad de parejas inician sus relaciones llenas de ilusiones y expectativas…entre ellas, que la pareja siempre va a ser y a estar de la misma manera para nosotros…Pero lo que antes era un valor y un aprecio, ahora se convierte en un fastidio y una obligación…

¿Cómo es que de pronto ese ser tan maravilloso y fascinante se ha convertido en alguien tan despreciable ante mis ojos?

Quizá porque lo hemos idealizado, hemos creído que sólo esas características que yo sentí, ví, creí, imaginé, durarían en el tiempo, además que no se alterarían. El velo de la realidad inicia su recorrido…

Esa persona, mi gran amor, es tan distinto a mí, que no encontramos maneras de relacionarnos, ni de amarnos, ni de comunicarnos. Por el contrario, tenemos el alma hecha pedazos, porque con el pasar del tiempo, sólo nos insultamos.
Cuando en un inicio alababa a mi pareja yo me sentía muy contento o contenta porque mi pareja parecía embonar muy bien con mi familia…ahora cada vez que se enoja, lo primero que ataca es a mi familia…

¿Cómo poder comprender una pareja de esta naturaleza?

Pareciera que en los momentos de enamoramiento todo, absolutamente todo, lo que yo hiciera o dejara de hacer, era muy valorado por mi pareja, también lo que me pertenece como son mis amigos y conocidos. Sin embargo, poco a poco, ya no me acompaña con mis amigos, le parecen aburridos, ya existen problema cada día que vamos con la familia, y lejos de pasarla bien, generalmente está de malas o se sale a hacer otras cosas.

Así en este aspecto, me parece que es importante puntualizar algunos detalles, probablemente mi familia le siga agradando, pero de tener aprecio por ellos, a tener que pasar todos los domingos o sábados con ellos, renunciando a ir al cine, a otra comida, salir a pasear o de compras, entonces, sí, que parece que tiene razón.
Cada integrante de la pareja tiene sus propios deseos, gustos, cualidades y defectos. Cada uno es diferente al otro. Cada uno expresa su amor de manera distinta. No le entusiasman las mismas cosas, ni le apasiona en el mismo grado ni con la misma intensidad lo que a mi me interesa…

La diferencia, fue justamente una de las razones de la atracción y de que hayamos decidido pasar un tiempo en pareja, como novios, amantes, pareja en unión libre o casados. Fue justamente lo que yo vi en él o ella diferente a mí, lo que llamó mi atención…

Entonces, a qué se debe que ahora que estamos en pareja, quiero cambiarlo, hacerlo igual a mí, que goce lo mismo que yo disfruto, que se enoje por lo que yo me disgusto y que tome en serio todas las cosas que le digo, sí cuando me enamoré de esa persona, todo lo tomaba a chiste…y en aquél entonces eso, me parecía tan, tan, divertido…

Desde mi particular punto de vista, vamos por la vida de pareja, tratando de que el otro o la otra, se ajusten a lo que yo soy o quiero. Dejo de ver a mi pareja como es, dejo de apreciar su diferencia y emprendo una lucha en querer que vea el mundo como yo.

Esas diferencias tan encantadoras se tornan ahora aterradoras. De manera que respetar la diferencia y lograr vivir con ella, es una de circunstancias que me permiten ir construyendo una vida de pareja más satisfactoria…

Con ello, quiero dejar claro, que ser diferente a mi pareja es ser yo mismo. Y sólo siendo Yo puedo aceptar que el otro sea él o ella, sin que sienta que la relación está en riesgo. Formar vínculos satisfactorios se basa en la diferencia… Sí Tú eres así, y asá, cómo podemos lograr el justo medio para relacionarnos?

No tengo que renunciar a ser Yo para seguirte amando… No tengo que renunciar a mi manera de ser para que sientas que te amo… Sólo puedo darte lo que soy y la manera en que lo hago. Y tú sólo puedes hacerlo y comportarte de esa manera…

¿Puedo aceptarlo?
¿Puedo convivir con lo diferentes que somos?

De acuerdo a nuestras diferencias, seremos capaces de crear un vínculo que sea equitativo y constructivo para ambos?

Estas son sólo algunas de las preguntas que merecen una respuesta reflexiva, no existen respuestas correctas o incorrectas. Cada integrante de la pareja, tendrá las suyas propias, no hay respuestas idénticas, ni iguales…

Con ello, quiero subrayar que existen infinidad de puntos en los que nuestra pareja no coincide con nosotros… pero también, estoy segura, que no me he dado cuenta que existen muchos factores, situaciones y puntos de vista en los que sí coincidimos…

¿Por qué tanto afán en centrarnos en las diferencias y no en las coincidencias?
La pregunta queda al aire… la mejor respuesta la tiene usted…

Respeto

En nuestra vida aveces estamos tan ocupados que es fácil que lleguemos envolvernos en todo lo que tenemos que hacer, esto le da paso al descuido y al deber de mantener buenas relaciones. Pero si vamos a tener relaciones fuertes y saludables que deseamos, es importante que nos demos un tiempo para pensar en formas para mantener las conexiones fuertes con nuestros amigos y familiares.


Una cosa que he aprendido es que el mostrar respecto a otros es una manera de mantener nuestras relaciones fuertes. Ahora bien, no siempre estaremos de acuerdo en todo, pero lo importante es respetar la opinion de cada y quien y entender que somos individuos con puntos de vista diferentes.

En el momento que se pierde el respeto, se comienza a decir cosas que no quisiera decir. Decimos las cosas para demostrar nuestro punto o tratar de enojar a la otra persona. Esto básicamente sólo trae conflictos en nuestras relaciones.
Una vez que hay una brecha entre una relación ya es muy difícil de repararla.

Es muy importante entender que todos venimos de diferentes orígenes. Hemos sido educados de manera diferente. La gente sólo ve las cosas de manera diferente, así que ¿por qué nos enojamos el uno al otro por desacuerdos? Es siempre bueno elegir el respeto y no dejar que las pequeñas cosas nos roben de la paz y el gozo que debemos tener a través de las relaciones en nuestra vida!

Definición de respeto: es el reconocimiento de que algo o alguien tiene valor. Se le puede definir como la base del sustento de la moral y la ética...Wikipedia.com

El "yo no puedo"

Muchas veces me e encontrado con personas que usan el "yo no puedo" mas de una ves por conversión. Estas personas no se han dado cuenta que el "yo no puedo" es uno de los obstáculos mas grandes que tienen en su vida.
¿alguna ves te as encontrado con personas así? Mi reacción, inconscientemente es tratar de no ponerle atención a esa frase, cuando alguien a mi alrededor la dice. El problema es que me e acostumbrado a corregir y a callar mi pensamiento cuando digo "yo no puedo" y termino comentandole a la persona lo que significa esa frase.

Yo creo que decir yo no puedo, realmente no es culpa de nosotros, si no de nuestros padres. Te acuerdas cuando estabas pequeño y tu padre o madre siempre te decían. No hagas esto, no hagas lo otro, no sirves para nada, lo hicistes mal, no debes hacerlo. Estuvistes saturado con el "no puedes" todos los días. Después crees que no puedes hacer nada, y terminas diciendo "yo no puedo".
Si eres padre o madre, te darás cuenta, cuantas veces les dices no a tus hijos. Ponle mucha atención cuando los estas corrigiendo y te darás cuenta.

Hay una frase que usan los políticos en sus campañas politicas y dicen: ¡si se puede!..¡si se puede!. Nunca se me olvida esa frase.
"Una persona usualmente se convierte en aquello que el cree que es. Si yo sigo diciéndome a mi mismo que no puedo hacer algo, es posible que yo termine siendo incapaz de hacerlo. Por el contrario si yo tengo la creencia que sí puedo hacerlo, con seguridad yo adquiriré la capacidad de realizarlo aunque no la haya tenido al principio. (Gandhi)